Mejora las condiciones de vida, la resiliencia a la inseguridad alimentaria y nutricional y la cohesión social de las poblaciones vulnerables en las regiones más frágiles a lo largo de las áreas transfronterizas entre Malí, Níger y Burkina Faso.

Fomento de la resilencia y la cohexión social en el Sahel

Artículo Original:

Fostering resilience and social cohesion in the Sahel

Las áreas transfronterizas entre Malí, Níger y Burkina Faso enfrentan complejos problemas de seguridad y altas vulnerabilidades económicas y sociales. Esta área de trashumancia compartida, afectada por el cambio climático, se queda sin recursos, lo que exacerba aún más las tensiones existentes dentro de las comunidades agropastorales. Por lo tanto, las poblaciones se enfrentan a una inseguridad alimentaria y nutricional cada vez mayor en medio del debilitamiento de los sistemas de gobernanza y gestión de conflictos.

Con fondos de la Unión Europea, nos asociamos con Action Contre la Faim, Terre des Hommes, Acted y cuatro organizaciones locales para responder a este llamado. Dentro de este consorcio, mejoramos las condiciones de vida, la resiliencia a la inseguridad alimentaria y nutricional y a los conflictos, y la cohesión social de las poblaciones vulnerables en las regiones más frágiles a lo largo de las fronteras de los tres países.

Nuestro proyecto de 48 meses “PROGRESS: program de REsilience et de cohésion Sociale au Sahel” (Programa de Resiliencia y Cohesión Social en el Sahel) se centra en varios temas que se desarrollan dentro de dos objetivos transversales:

  1. FORTALECER LOS MEDIOS DE VIDA DE LAS POBLACIONES AGRÍCOLAS Y PASTORALES MEDIANTE LA CONSTRUCCIÓN DE LA RESILIENCIA A LA INSEGURIDAD ALIMENTARIA Y NUTRICIONAL DE FORMA SOSTENIBLE Y ESTRUCTURAL.
    El consorcio está llevando a cabo una acción multifactorial para que los hogares más pobres puedan cubrir sus necesidades básicas. Esta acción tiene como objetivo facilitar el acceso a los sistemas de protección social, los servicios sociales básicos y los servicios de crédito y ahorro, y diversificar las capacidades productivas agrícolas y pastorales.
    Nuestros socios realizan, entre otras cosas, actividades de incidencia para incluir a estos hogares en los planes nacionales de protección social y facilitar su acceso a los servicios de salud, iniciativas de restauración de tierras, campañas de sensibilización sobre diversificación de ingresos, mejores prácticas de higiene y atención materna.
    Nuestra experiencia en sensibilidad al conflicto guía cada paso del proceso de implementación. Identificamos los posibles impulsores de conflictos para proporcionar las recomendaciones necesarias para adaptar nuestras intervenciones para mitigar los riesgos de división y resaltar las oportunidades de paz.
  2. APOYO A LAS COMUNIDADES E INSTITUCIONES LOCALES EN LA PREVENCIÓN DE CONFLICTOS Y EL FORTALECIMIENTO DE LA COHESIÓN SOCIAL.
    Este eje representa nuestra principal área de especialización y actuación. Nuestro enfoque es doble: mejorar las relaciones entre las autoridades y las poblaciones y acercar a las comunidades. Aprovechando nuestra experiencia en el fortalecimiento de la gobernabilidad local, creamos espacios de diálogo entre instituciones y ciudadanos y los apoyamos en el desarrollo conjunto de planes de acción para mejorar la calidad de los servicios básicos (salud, desarrollo rural, sector agropastoril).
    A través del uso de cuadros de mando, las comunidades están equipadas con herramientas concretas para evaluar estos servicios y así proporcionar recomendaciones sólidas y garantizar una mejor rendición de cuentas de las autoridades. También ponemos a los jóvenes al frente de los esfuerzos locales de prevención de conflictos al capacitar a 540 jóvenes en liderazgo inclusivo, transformación de conflictos y comunicación positiva.
    Para poner en práctica estas nuevas habilidades, los ayudamos a implementar iniciativas para fomentar la convivencia pacífica en sus comunidades, como deportes, teatro y festivales culturales.
    También ponemos a los jóvenes al frente de los esfuerzos locales de prevención de conflictos al capacitar a 540 jóvenes en liderazgo inclusivo, transformación de conflictos y comunicación positiva. Para poner en práctica estas nuevas habilidades, los ayudamos a implementar iniciativas para fomentar la convivencia pacífica en sus comunidades, como deportes, teatro y festivales culturales.